Homero,
el griego, el primer escritor conocido en la historia de occidente, el autor de los
eternos poemas Ilíada y Odisea, el padre de la cultura occidental, nuestro Homero,
nos deja, en la rapsodia I renglón 586 de la inmortal Ilíada, un verso, que
podría ser tal vez la primer idea estoica en la historia, acerca de la actitud
que debemos tener frente al dolor que nos aflige. En efecto, Hera, la diosa
olímpica, esposa de Zeus, acaba de discutir con su esposo, el primero entre los
dioses, el más poderoso del Olimpo, y su hijo Hefesto, dios del fuego, la ve
afligida y le dice: “sufre, madre
mía, y sopórtalo todo aunque estés afligida; que a ti, tan querida, no te
vean mis ojos apaleada, sin que pueda socorrerte, porqué es difícil contrarrestar
al Olímpico.” Esta frase queda para la posteridad como una enseñanza del
Sabio griego sobre la actitud que debemos adoptar los humanos ante los males
que nos afligen: Sufrir y soportar. Frente a las situaciones que nos afectan y
que no dependen de nosotros porque no podemos contrarrestar al destino o al
azar, o según Homero, al Olímpico ¿qué debemos hacer? Hasta los dioses deben
soportar aquello que los aflige y que no tiene solución. Es inevitable la muerte,
la nuestra, pero sobre todo la de un ser querido, como inevitable es una catástrofe
natural que destruya nuestra casa o se lleve muchas vidas, como inevitable es
que nuestro ser amado deje de amarnos sin una justificación, como inevitable es que
perdamos algo que nos costó esfuerzo conseguir, como inevitable es no lograr
conquistar aquello que teníamos por meta… La lista es larga y cada uno de nosotros
puede continuarla o adaptarla a su experiencia personal. ¿Qué me aflige? ¿Cuál
es la actitud que asumo frente a esta situación?
Algunas
personas optan por una vida desordenada, vicios, licor y mujeres, otros optan
por el descontrol nervioso, otros por el llanto y la angustia perpetua, otros
por maldecir a Dios y otros por el suicidio. Pero la enseñanza de los dioses,
conocedores de lo humano, por medio de la palabra Homérica, es la de soportar
el sufrimiento. Como seres humanos estamos obligados a sufrir. Es un hecho. La
vida humana se compone, entre otras cosas de sufrimiento. Y debemos aprender a
soportarlo. El sufrimiento pasa, cualquiera que sea el motivo que lo causa.
Debemos saberlo para que cuando nos llegue sepamos cómo actuar. Se sufre y hay
que aprender a sufrir, no como los masoquistas que buscan el sufrimiento por el
placer que les causa, si no como el sabio que soporta los dolores porque sabe
que hacen parte de nuestra vida y que el tiempo los va disminuyendo hasta que
se convierten en un recuerdo. No podemos evitar el sufrimiento pero si podemos
mitigarlo, ¿cómo? Sufriendo y soportándolo aunque nos hallemos afligidos.
Es un hecho. La vida humana se compone, entre otras cosas de sufrimiento. Y debemos aprender a soportarlo. El sufrimiento pasa, cualquiera que sea el motivo que lo causa. Excelente parte...me encanto!
ResponderEliminarNacimos con dos propósitos: Morir y sufrir intensamente en el proceso.
ResponderEliminarEl sufrimiento pasa, cualquiera que sea al motivo que lo causa... aunque a veces demora más en unas personas personas que en otras y a veces también unos "sufrimientos" duelen y marcan más que otros
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